Se acerca el verano en Madrid y esta vez no me va a agarrar desprevenido. Llamé a los mismos amigos que me habían mandado hace unos días a un fontanero y les pedí que me mandaran a un técnico para que me hiciera la instalacion de un aire acondicionado.
La verdad que el tío hizo su trabajo en un santiamén y en forma muy prolija. Vino el viernes pasado y en tan solo una hora hizo la instalación. La próxima vez que tenga que hacer alguna reparación no dudaré en volver a llamarlos.
Tener aire acondicionado en casa es una bendición. Hoy ya está haciendo calor y lo puse a 24 grados. No saben cómo cambió el ambiente en mi casa. Ahora estoy fresquito y listo para pasar el verano en mi casa junto con mi familia.
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